En 1940 participó en la Exposición Internacional Surrealista celebrada en México. Un año más tarde fue nombrado profesor de arte en el North State Teacher College en Denton, Texas, y a partir de 1949 comenzó sus investigaciones sobre integración de las artes, aplicando los resultados en los murales que realizó para la Secretaría de Recursos Hidráulicos (1949), para el centro infantil del multifamiliar "Miguel Alemán", de [Av. Coyoacán] (1950), y para el edificio multifamiliar "Presidente Juárez", en la ciudad de México (1950-1952) [Av. Cuauhtémoc]; en este último la temática se centró en torno a una serie de leyendas mexicanas acerca del origen del mundo —"El Popol Vuh" (aludiendo al libro antiguo descubierto en Guatemala de los maya-quichés, "Los ocho dioses del olimpo mexicano", "El Ixtlexilt", "Los cuatro soles"—. Los multifamiliares Juárez y los murales fueron severamente dañados por el temblor del 19 de septiembre de 1985.
Desde 1950 su arte experimenta ciertos cambios y su obra ofrece un estilo más próximo al constructivismo, como se observa en el edificio de Reaseguros Alianza de la ciudad de México, cuyo mural "Estilización de motivos mayas" (1953) está realizado en mosaico de vidrio. Con esta misma técnica, en la década de 1950 realizó diversos murales para empresas comerciales y privadas mexicanas. También en 1956 realizó, en el Palacio Municipal de Guatemala, un mosaico de vidrio (La mestiza de Guatemala). Desde entonces, Mérida alternó la realización de murales para México y Guatemala, en los que dominaban motivos abstractos y constructivos. Con el espíritu innovador que le caracterizaba, en 1964 hizo un muro vitral en la sala "Cora Huichol" (Los adoratorios) del Museo Nacional de Antropología de México D.F. y en 1968, otro en el Centro Cívico de San Antonio (Texas) (La confluencia de las civilizaciones en América). En 1965 recibió la medalla de oro de la Dirección General de Cultura y Bellas Artes de Guatemala, y en 1980 "Orden del Águila Azteca" de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México.