Nació el 4 de marzo de 1912 en la Ciudad de Quetzaltenango. Hijo único de An-
drés Galeotti Barattini y María Concepción Torres de Galeotti.
Estudió la primaria en la ciudad altense y en sus años de adolescencia es ini-
ciado por su padre en la técnica de la talla en mármol, siendo una de sus primera
obras de marmolería, una placa de gratitud dedicada por su madre al Hermano Pedro.
Recién diplomado en Ciencias y Letras por el Instituto Normal para Varones de
Occidente INVO, se marchó a Europa realizar sus estudios de escultura en la Real
Academia de Bellas Artes y en las escuelas de Carrara, Italia(1931), siendo sus
principales maestros Guelfo Raffo, Augusto Pollina y Arturo Nelli.
Se graduó el 24 de junio de 1933 como Profesor Honorario de la Academia de Be-
llas Artes de Carrara. Allí aprende la talla directa en el mármol y la piedra,
tanto en alto y bajo relieve, como en escultura exenta. Desentraña también los
misterios, cuyo proceso de fundición le será tan útil en Guatemala para inmortali
zar al héroe nacional Tecún Umán, y a otros personajes.
Al regresar de Italia se inicia en el mundo de la pintura, pero su producción
artística escultórica arranca en el año 1934. Se entrega a plasmar en la piedra,
el yeso y el mármol temas de nuestro mundo indígena.
Ha tomado parte en la mejor parte de exposiciones, mereciendo los primeros pre
mios en varias de ellas. Con su obra en relieve titulada “Canza” mereció el
primer premio en el primer concurso Rafael Yela Ghunter, obteniendo el mismo pre-
mio al año siguiente.
Ha ejecutado varias obras, entre ellas podemos citar: decoración escultórica
en el Palacio Maya de San Marcos, el “Obelisco de la Victoria” en Quetzaltenango,
que mide 19 metros de alto; ejecutó en talla discreta sobre piedra una decoración
escultórica en el Palacio Nacional.
Ha ejecutado muchos estudios de cabezas de nuestro mundo intelectual, así como
obras de positivo valor plástico inspirado en temas autóctonos como su obra “Can-
to al sudor”, que fue adquirida por la Universidad Popular.
Galeotti Torres es, sin duda alguna, el escultor más vigoroso y mejor dotado de
nuestra patria y su personalidad está reconocida en nuestra América India, como un
artista de verdad. Sus obras: “Hermosa en la playa”, “Al trabajo” (Z.5), “Peón”,
en la UP, “A la Marimba”, en la entrada a Quetzaltenango, y el tríptico “La Revolu
ción” (Z.13).
Nació el 4 de marzo de 1912 en la Ciudad de Quetzaltenango. Hijo único de An-
drés Galeotti Barattini y María Concepción Torres de Galeotti.
Estudió la primaria en la ciudad altense y en sus años de adolescencia es ini-
ciado por su padre en la técnica de la talla en mármol, siendo una de sus primera
obras de marmolería, una placa de gratitud dedicada por su madre al Hermano Pedro.
Recién diplomado en Ciencias y Letras por el Instituto Normal para Varones de
Occidente INVO, se marchó a Europa realizar sus estudios de escultura en la Real
Academia de Bellas Artes y en las escuelas de Carrara, Italia(1931), siendo sus
principales maestros Guelfo Raffo, Augusto Pollina y Arturo Nelli.
Se graduó el 24 de junio de 1933 como Profesor Honorario de la Academia de Be-
llas Artes de Carrara. Allí aprende la talla directa en el mármol y la piedra,
tanto en alto y bajo relieve, como en escultura exenta. Desentraña también los
misterios, cuyo proceso de fundición le será tan útil en Guatemala para inmortali
zar al héroe nacional Tecún Umán, y a otros personajes.
Al regresar de Italia se inicia en el mundo de la pintura, pero su producción
artística escultórica arranca en el año 1934. Se entrega a plasmar en la piedra,
el yeso y el mármol temas de nuestro mundo indígena.
Ha tomado parte en la mejor parte de exposiciones, mereciendo los primeros pre
mios en varias de ellas. Con su obra en relieve titulada “Canza” mereció el
primer premio en el primer concurso Rafael Yela Ghunter, obteniendo el mismo pre-
mio al año siguiente.
Ha ejecutado varias obras, entre ellas podemos citar: decoración escultórica
en el Palacio Maya de San Marcos, el “Obelisco de la Victoria” en Quetzaltenango,
que mide 19 metros de alto; ejecutó en talla discreta sobre piedra una decoración
escultórica en el Palacio Nacional.
Ha ejecutado muchos estudios de cabezas de nuestro mundo intelectual, así como
obras de positivo valor plástico inspirado en temas autóctonos como su obra “Can-
to al sudor”, que fue adquirida por la Universidad Popular.
Galeotti Torres es, sin duda alguna, el escultor más vigoroso y mejor dotado de
nuestra patria y su personalidad está reconocida en nuestra América India, como un
artista de verdad. Sus obras: “Hermosa en la playa”, “Al trabajo” (Z.5), “Peón”,
en la UP, “A la Marimba”, en la entrada a Quetzaltenango, y el tríptico “La Revolu
ción” (Z.13).
